OBRAS COMPLETAS DE JOSE CARLOS MARIATEGUI

HISTORIA DE LA CRISIS MUNDIAL

 

1914-1918: LA GRAN GUERRA

 

 

El juicio de las responsabilidades de la gue­rra europea está aún abierto. Ninguna duda cabe respecto a las intenciones agresivas y a los pla­nes imperialistas del Kaiser alemán. Pero ningu­na duda cabe tampoco acerca de las maniobras con que Inglaterra, Rusia y Francia, aunque no fuera más que proponiéndose dar jaque mate al Kaiser, conducían a Europa a la guerra. Los tér­minos humillantes en que Austria trató a Servia, exigiéndole reparación por el asesinato de Sa­rajevo, no habrían sido tan inexorables y duros, si Austria, que sabía que tras de Servia estaba Rusia, no se hubiese sentido incondicionalmente respaldada, si no excitada, por Alemania. Rusia, a su vez, no habría sostenido tan resueltamente a Servia ni habría marchado tan de prisa a la movilización, si no hubiese estado segura de que tanto Francia como Inglaterra, se habrían de lanzar con ella contra los Imperios Centrales. Un hombre de gobierno de uno de los principales pueblos combatientes, Lloyd George, ha conveni­do en que la tesis más prudente es la de que a la guerra se llegó no por premeditada y exclusiva voluntad de una sola de las partes, sino por una serie de actos irreflexivos, de todos o casi todos los beligerantes, que hicieron finalmente inevi­table el conflicto armado. Las memorias del em­bajador de Francia en Rusia, hasta 1912, Geor­ges Louis, entre otros documentos, acreditan la complicidad de la Cancillería francesa con los manejos de la diplomacia zarista más intrigante y' peor intencionada. Escritores franceses como Fa­bre Luce y M. Morhardt, han demostrado en sus libros, documentada y seriamente, la inconsisten­cia de la versión que atribuye a los Imperios Cen­trales la responsabilidad total de la guerra, exi­miendo de culpa a los gobiernos aliados.

La crónica registra en el siguiente orden los hechos que señalaron el comienzo de la guerra: El 24 de junio Austria-Hungría envió a Servia un ultimátum para que le diese amplia repara­ción por el asesinato del príncipe heredero del Imperio en Sarajevo, reprimiendo a los cómpli­ces y la propaganda anti-austríaca. Poincaré y Viviani habían visitado al Zar, poco antes, en el instante de mayor tensión de las negociaciones. Todo hacía esperar entonces el ultimátum aus­tríaco. Hay sobrado indicio de que Poincaré, lejos de emplear su esfuerzo en un sentido de mo­deración y prudencia, alentó con su lenguaje al Zar y a su ministro Sazonof a mantener una ac­titud inflexible frente a Austria, sin preocuparse de las consecuencias. El gobierno servio, eviden­temente manejado por Rusia, respondió al ulti­mátum de Austria en forma inconcluyente y, en algunos puntos, reticente y dilatoria. El 28 de junio, un mes después del crimen de Sarajevo, Austria declaraba la guerra a Servia. El 29 pre­sentó Sazonof al Zar el úkase de movilización general. El Zar lo sustituyó, por el momento, por una orden de movilización parcial; pero el 30 Sazonof le arrancó la movilización general. Este acto equivalía a decidir la guerra. El 31 de julio Alemania dirigía un ultimátum a Rusia y Fran­cia; el 19 de agosto declaraba la guerra a la pri­mera y el 2 a la segunda.

Alemania sabía que el éxito de sus operaciones contra Francia, dependía de la posibilidad de asestar a su poder militar golpes fulminantes y decisivos. Su ejército se lanzó al ataque a través de Bélgica violando la neutralidad de ese país. Invocando este hecho, Inglaterra entró en la guerra, al lado de sus aliados, el 4 de agosto. Menos de una semana había bastado para que la conflagración se encendiese en toda Europa.

La crónica de la guerra misma se resume en las siguientes fechas y sucesos salientes: 3-12 de setiembre de 1914, Batalla del Marne. Francia contiene victoriosa el avance de los alemanes. Parada así la ofensiva, comienza entre los dos ejércitos, en un extensísimo frente, una guerra de trincheras que se prolonga hasta el armisticio. — 26-29 de agosto de 1914, rechazo de los rusos en Tanenberg. 6 de agosto de 1915, entrada de los alemanes en Varsovia. — 23 de mayo de 1915, Italia declara la guerra a Austria- Hungría, reivindicando Trento y Trieste. — 21-26 de febrero de 1916, Batalla de Verdún. — 4 de junio de 1916, ofensiva rusa dirigida por el general Brussilov, en el frente de Volhynia y Bukovina. — 27 de agosto de 1916, Rumania se une a los aliados. — Julio-noviembre de 1916, ofensiva franco-británica del Somme. — 7 de diciembre de 1916, los alemanes ocupan Bucarest. — 12 de diciembre de 1916, Alemania propone la apertura de negociaciones de paz. — Marzo-agosto de 1917, ofensiva italiana del Carso. — 4 de abril de 1918, Estados Unidos declara la guerra a Alemania. — 3 de marzo de 1918, Alemania y Rusia suscriben la paz en Brest-Litovsk. 21 de marzo de 1918, Batalla «del Kaiser», en un frente de 400 kilómetros, en la Picardía y Flandes. — 27 de mayo de 1918, Chemin des Dames. 18 de junio, Capitulación de Austria-Hungría, a consecuencia de la victoria italiana de Vittorio Veneto. — 11 de noviembre de 1918, Capitulación de Alemania.

La fecha que cierra el período bélico es la de la suscripción del tratado de paz de Versalles el 28 de junio de 1919.