OBRAS COMPLETAS DE JOSE CARLOS MARIATEGUI

POEMAS A MARIATEGUI

      

    

AURELIO MARTINEZ ESCOBAR

(Peruano)(1904)

 

Poeta puneño, perteneció al cenáculo literario La Tea (1916-1919), dirigido por Gamaliel Churata y propiciado por Federico More.

Obra: Nueve libros de poemas, en castellano, quechua y aimara. Mantiene inéditos los libros de cuentos nativos, cinco novelas de ambiente andino, un libro de folklore puneño y un libro sobre música y danzas de Puno.

 

 

PUNTAS DE LANZA POR LA PRESENCIA DE JOSE CARLOS MARIATEGUI

por: Aurelio Martínez

I

En los señoríos de tu simiente inca

el dolor con el estruendo

de sus picas te cantó....

Pututos exacerbados

trapinaron por la vertebración ande

cuando la arquitectura de tus huesos

se fué por la ternura sapiente de la tierra...

Y en las zampoñas del alma india

creció dimensionada

a trágica desesperación de un ayarachi,..

II

Quedan tus pergaminos de Amauta

colgados en los andenes de todos los Suyos

para que nunca más lloren los pobres

ya que tú enseñaste enfilar sus banderas

a golpes de estatuto...

Tú encendiste

las fogatas que lamen los caminos

donde una bronca de pasos

está haciendo la épica de la historia...

Así el clima de tus provincias

pobladas de proletarios

ya están vibrantes con tu Gobierno

porque decretaste su inquietud...

José Carlos

tenso soldado rojo de los pobres

siguen en tu campaña alucinada

tus pensamientos mariáteguis....

Las claras ráfagas de tus palabras

con que cañoneaste

junto con las que el tiempo dispara y parapeta

están destruyendo tanta

Pinchada fortaleza de barrigas...

III

Por saber llevar tu pena

de mano con las penas de los pobres del mundo

arrancando amor de las peñas de Marx

te insumiste en tus profundidades

para aflorar prolongado, Por eso

Mariátegui

por los llanos y colinas peruanistas

te escapas de las grupas de la muerte

para la carrera abierta de tus victorias

con zarpazos de ruso

y con impulsos de humanidad...

No necesitas de Olimpos

hoy que todos los hombres

son forzados que trabajan su bien...

Sigue Mariátegui

con el riego de tus ritmos justicieros

que son flechas sin reposo

buscando el salmo de las cosechas...

Hay tanto cráneo que limpiar

Mariátegui de los aceros inmanentes

y tanto surco gris que iluminar

y tanto

que construir y elevar corazones

José Carlos de los abrazos camaradas

que sigues en la guardia de tu faro…

Puno — Abril de 1044